
De peleas en el parque a comunicación efectiva
Tu hijo está corriendo hacia un columpio en el patio de recreo y lo alcanza en el mismo momento que otro niño. El chico exclama: «¡Yo llegué aquí primero!» El tuyo responde: «No, yo lo hice. ¡Es mío!» Después de este breve intercambio, ambos niños pierden la paciencia. En un ataque de frustración, tu hijo patea al otro niño y se queda con el columpio. El otro chico se queda con lágrimas. Desde nuestra perspectiva de adultos, podemos pensar en mejores formas de resolver esta situación que no involucren patadas y lágrimas. ¿Qué tal si nos turnamos? ¿Qué tal si lo hablamos?
A veces enseñarles a los niños habilidades de comunicación puede parecer más difícil que las clases de cálculo. Cuando los niños intentan comunicarse, las emociones pueden ser fuertes y es difícil tener una conversación productiva. Pero la comunicación asertiva es una habilidad importante para la vida y puede ser clave para prevenir el abuso sexual infantil.
Desarrollar habilidades de comunicación sólidas le permitirá a tu hijo mantener límites saludables y tener un diálogo contigo sobre preguntas e inquietudes, especialmente sobre temas sensibles. Al igual que con cualquier cosa nueva, tomará tiempo y práctica para que los niños aprendan. No esperes que el impulso de patear a alguien en el patio de recreo desaparezca de la noche a la mañana. Pero aquí algunas maneras en que tú puedes ayudar a que las habilidades de comunicación crezcan independientemente de la edad de tu hijo.
Crea Confianza
Cuando tu hijo hable contigo, escucha y toma en serio lo que te dice. Le dará confianza de que lo que piensa y dice es importante para ti. A veces los niños tienen fuertes reacciones emocionales porque sienten que es la única manera en que pueden llamar la atención de alguien. Si tu hijo sabe que puede hablar y que tú lo escucharás, no tendrá que recurrir a actuar de maneras improductivas.
Ayuda a establecer límites
Ayuda a tus hijos a establecer límites que los hagan sentir cómodos y seguros, y luego enséñales cómo comunicar esos límites a los demás. Desarrollarán habilidades de comunicación asertivas que pueden usar en muchas situaciones. Refuerza positivamente el comportamiento de tu hijo cuando lo veas estableciendo y manteniendo límites.
Recibe Bien Las Preguntas
Todos hemos experimentado la frustración de interactuar con el niño curioso de cinco años que no deja de hacer preguntas, pero escuchar y responder puede abrir un diálogo. Debra Haffner, educadora de crianza, explica que cuando un niño te hace una pregunta, «te están haciendo saber que confían en ti para darles una respuesta honesta. Al decir: ‘Me alegro de que me hayas preguntado eso’, les estás haciendo saber que quieres ayudarlos».1 Cuando los niños vienen a ti con preguntas e inquietudes, este es un momento de oro para ti como padre. Utilízalo como una oportunidad para fomentar la conversación y abrir un diálogo.
Tú puedes empoderar a tu hijo con información, puedes ayudarlo a desarrollar la capacidad de expresarse con asertividad, y puedes alentarlo a que te vea como alguien a quien siempre puede acercarse. Cuando tu hijo tenga preguntas o si alguna vez sucede algo que lo incomoda, serás alguien de quien pueda depender.
Referencias:
COMPARTE ESTA PUBLICACIÓN